La subida de precios en 2017 se debe sobre todo al impacto de los nuevos costes que debe asumir la banca.
Las hipotecas fijas con un interés por debajo de la barrera del 3%, que hace tan solo unos meses eran de lo más común entre la oferta comercial de las entidades financieras tras las rebajas que llevaron los precios a niveles históricamente bajos, empiezan a escasear y podrían estar a punto de extinguirse. El encarecimiento de los préstamos fijos para la compra de una vivienda que se preveía para este año ya se está generalizando. Fueron Bankinter, BBVA y Sabadell los que tomaron la iniciativa, pero al menos Popular, Liberbank y Abanca ya se han subido al carro de la subida de los intereses cuando aún no han pasado ni dos meses de 2017. Otros como Bankia han optado de momento por elevar las comisiones. Así, apenas cinco bancos comercializan ya hipotecas con tipos fijos que rondan el 2% TAE.
Según David Ruiz, consultor del área de banca en Analistas Financieros Internacionales (AFI), las razones detrás de las subidas de las hipotecas fijas, que el año pasado cobraron protagonismo como arma de las entidades para conseguir un extra de rentabilidad ante los bajos tipos de interés, hay que buscarlas en “los posibles costes a los que las entidades tienen que hacer frente después de lassentencias a favor de la protección de los consumidores, como las devoluciones por las cláusulas suelo, y la nueva circular de provisiones que entró en vigor el pasado octubre y que obliga a la banca a medir lo que cuesta conceder los préstamos”. Añade que “son dos vías de costes que ahora la banca tiene en cuenta y repercute en el precio de las hipotecas”.
Es por eso que lo habitual ahora empiezan a ser los TAE entre el 3% y el 4%, todavía lejos eso sí del 6% o incluso del 7% que llegaron a verse hace años, cuando las hipotecas variables y no las fijas eran el producto estrella de la banca en la época del boom inmobiliario.
Los expertos creen que la revisión al alza de las hipotecas a tipo fijo continuará en los próximos meses, “pero ya no habrá subidas muy grandes”, sostiene Ruiz, que argumenta que “todavía no ha habido un subida efectiva de los tipos oficiales y, aunque se está descontando que los bancos centrales pueden dejar de aplicar estímulos antes de lo esperado, no se descuenta un alza de tipos en Europa en 2017”.
Un ejemplo de que pese al cambio de perspectivas en los tipos (lo que también está motivando a las entidades a subir los precios de las hipotecas fijas, dado que suelen anticiparse al cambio de escenario), todavía queda tiempo para se incrementen en la zona euro es la cotización del euríbor a doce meses, que no solo encadena ya doce meses consecutivos en negativo sino que sigue registrando mínimos mes a mes (la tasa provisional de febrero es del -0,105% tras cerrar enero en el -0,095%).
Además, a juicio de Ruiz, si uno de los motivos que han puesto de moda las hipotecas a tipo fijo, que según la Asociación Hipotecaria Española (AHE) a finales de 2016 ya representaban un tercio de las contrataciones de los nuevos préstamos para la vivienda, “es su atractivo precio pensando en varios años vista”, de llevarse a cabo una elevada subida “les restaría atractivo” y los clientes volverían a tener más en cuenta las hipotecas variables.
En estos momentos, únicamente Bankinter, BBVA, Bankia, Bankoa y BMN siguen teniendo hipotecas fijas con intereses inferiores al 3% TAE.
Fuente: CincoDías