Un año más, no debemos olvidar que, la Lotería de Navidad tributa a Hacienda. Concretamente, los números premiados con un importe superior a 2.500 euros deben pagar impuestos. A continuación, a analizamos cómo y cuánto debe pagar fiscalmente por sus décimos y participaciones.
Si tiene la fortuna de que el 22 de diciembre le toque el Gordo, es decir, los 400.000 euros del primer premio, debe saber que 79.500 euros irán a las arcas públicas. La Lotería de Navidad, que antes estaba exenta fiscalmente, tributa desde el ejercicio 2013. El Gobierno incluyó esta «penalización fiscal», que afecta a todos los premios de Loterías y Apuestas del Estado, en los Presupuestos Generales del Estado de 2013.
El Ejecutivo lanzó esta medida para impulsar la recaudación fiscal, pero no logró los objetivos esperados. El impuesto de Loterías aportó a las arcas del Estado apenas 268 millones de euros en 2013 y 456 millones de euros en 2014, cifras lejanas a los 824 millones esperaba recaudar la Agencia Tributaria cada año.
Así grava Hacienda los décimos premiados
Desde 2013, cualquier persona que estas Navidades obtenga un premio superior a 2.500 euros verá cómo se le aplica una retención del 20%. Es decir, si la suerte le sonríe y su décimo es premiado, por ejemplo, con los 400.000 euros del Gordo le tocará pagar al fisco. Concretamente, debe saber que los primeros 2.500 euros están exentos y que tributará por el resto. De esta forma, en el caso del Gordo 79.500 euros irán a Hacienda.
Estos impuestos se retendrán directamente en el momento del cobro de décimo premiado. En este sentido, la Agencia Tributaria explica que los contribuyentes del IRPF que hayan soportado la retención en el momento del abono del premio, o no la hayan soportado por ser su cuantía inferior a 2.500 euros, no tendrán que presentar ninguna otra autoliquidación.
Fuente: Expansión